9 de febrero de 2012



Muchos años después comprendimos por qué el tío Sidney se ponía nervioso cada vez que veía una cámara fotográfica. Algo que entristecía a la abuela, ya que no tenía ni un solo retrato de su hijo. Ni siquiera sabía en que trabajaba. De cuando en cuando el tío traía dinero y se marchaba. Luego hubo un largo silencio, hasta que apareció su ficha policial. Al parecer era un peligroso atracador de bancos. Según la versión oficial, el tío Sidney murió ahogado en los pantanos de Louisiana tras fugarse de la cárcel. Sea como fuere, la abuela por fin tuvo una imagen de él. Y segundos después un infarto a causa del sofocón.