5 de junio de 2012




Los Forrester nunca comprendieron su enorme, pero efímera, popularidad cuando lo que era algo habitual para ellos y sus conciudadanos, un ávido periodista lo convirtió en una inusual noticia que se expandió por todo el país, ya que tenían la particularidad de andar inclinados hacia su lado izquierdo. El revuelo que generó hizo que viniesen unos investigadores de Boston para explicar tan asombroso milagro. Pero la cosa duro muy poco y los científicos, tras los resultados, procuraron, por la cosa de preservar su prestigio, ocultar sus nombres, porque tal fenómeno era producto de la arraigada costumbre de los Forrester de pasar largas horas apoyados en las columnas del porche de su casa entregados a la contemplación.

· Fondo musical para acompañar la lectura: Louis Armstrong - La vie en rose (http://www.youtube.com/watch?v=vmkKfyYxznk)